La educación en Paraguay: entre desafíos urgentes y reformas necesarias

por Eva Venialgo
La educación es uno de los pilares fundamentales para el desarrollo de una nación, no solo como herramienta para la movilidad social, sino también como motor de crecimiento económico y cohesión social. En Paraguay, este sector atraviesa una compleja realidad que evidencia desigualdades estructurales, carencias presupuestarias y un bajo rendimiento académico. A pesar de algunos avances, los indicadores muestran una urgente necesidad de reformas que permitan ofrecer una educación de calidad, inclusiva y adaptada a las exigencias del siglo XXI.
Uno de los datos más alentadores en el panorama educativo paraguayo es la alta tasa de asistencia escolar en los primeros niveles. Según la Encuesta Permanente de Hogares Continúa (EPHC) 2023 del Instituto Nacional de Estadística (INE), más del 97% de los niños y niñas entre 5 y 14 años asisten a la escuela. Sin embargo, a medida que se avanza en edad, esta cifra disminuye drásticamente, alcanzando apenas un 31,4% en jóvenes de entre 20 y 24 años.

Este descenso refleja problemas estructurales como la necesidad de insertarse tempranamente en el mercado laboral, la falta de acceso a instituciones de educación superior en zonas rurales y el bajo incentivo académico. ²Además, el promedio de años de estudio para la población mayor de 15 años es de 9,9 años, equivalente a un nivel apenas básico.
El panorama se agrava con los resultados de la prueba PISA 2022. Paraguay se ubicó en los últimos lugares a nivel regional, especialmente en matemáticas, dónde 9 de cada 10 estudiantes no alcanzaron el nivel mínimo requerido. En comprensión lectora, 7 de cada 10 alumnos no logran interpretar adecuadamente un texto. Esto revela serias deficiencias en los procesos de enseñanza-aprendizaje, así como en la formación y actualización docente. Lo más alarmante es que estos resultados no han mejorado desde el 2017.
Otro aspecto que ha generado debate es la implementación del nuevo currículo nacional de educación sexual en 2024. Aunque representa un paso hacia la modernización del sistema educativo, ha sido ampliamente criticado por organizaciones estudiantiles y de derechos humanos. La propuesta promueve la abstinencia como única alternativa y excluye deliberadamente información científica sobre métodos anticonceptivos y diversidad sexual, lo que limita el derecho de los jóvenes a una educación integral y basada en evidencia.
En cuanto a la inversión, el Ministerio de Educación y Ciencias (MEC) destina el 85% de su presupuesto al pago de salarios, dejando solo un escaso 7% para la mejora de la calidad educativa, la infraestructura y los materiales didácticos. Esta distribución poco eficiente impide innovaciones pedagógicas y el fortalecimiento de políticas públicas que impacten positivamente en los resultados educativos.

La situación de la educación en Paraguay es un llamado urgente a la acción. Después de revisar los datos, no quedan dudas: la educación en Paraguay está estancada en muchos aspectos, y eso nos debería doler como sociedad. No basta con que los niños estén en la escuela — necesitamos que aprendan, que se formen para un mundo cambiante, que salgan de ahí con herramientas reales para construir su propio camino. Y eso hoy, sinceramente, no está ocurriendo.
Los más preocupantes es que esta situación no es nueva, ni es desconocida. Sabemos lo que pasa, y también sabemos lo que se necesita para cambiar. Pero sin voluntad política real, sin una ciudadanía que exija y se involucre, nada va a cambiar. La educación no se transforma desde el discurso, sino desde la acción.
No se trata solamente de aumentar presupuestos, sino de redistribuir con inteligencia los recursos existentes, priorizando la formación docente, la innovación pedagógica, la infraestructura escolar y el acompañamiento integral a los estudiantes. Es inconcebible que en pleno siglo XXI sigamos teniendo brechas tan profundas entre la educación urbana y la rural.
Necesitamos con urgencia un cambio de paradigma. Apostar por una educación liberal, no solo en el sentido económico, también en su raíz más profunda: una educación que forme personas libres, críticas, responsables y conscientes de su lugar en el mundo. Una educación que no le tenga miedo a la diversidad, a la ciencia, ni al pensamiento independiente.
Fuentes consultadas:
El INE comparte datos sobre la educación paraguaya. Disponible en <https://www.ine.gov.py/noticias/1890/el-ine-comparte-datos-sobre-la-educacion-paraguaya>.
Promedio de escolaridad en Paraguay: Disponible en <https://www.adndigital.com.py/promedio-de-escolaridad-en-paraguay-se-estanca-en-el-noveno-grado-revela-ine/>.
El alarmante estado de la educación paraguaya y la urgencia de reformas. Disponible en <https://www.laclave.com.py/2025/02/25/el-alarmante-estado-de-la-educacion-paraguaya-y-la-urgencia-de-reformas/>.
Paraguay sex education. Disponible en: <https://www.theguardian.com/world/article/2024/sep/10/paraguay-sex-education-curriculum>.
- El sistema educativo de Paraguay entre los peores del mundo. Disponible en https://www.nodal.am/2023/06/el-sistema-educativo-de-paraguay-entre-los-peores-del-mundo-por-celso-guanipa-castro/